La verdad del Santo Caliz valenciano

En estos tiempos que corren cualquier recurso para conseguir minutos en la tele y para conseguir turismo hacia nuestra tierra parece salir a la palestra. Vivimos de pleno cualquier evento deportivo y ahora parecen que quieren convertir Valencia en una nueva Lourdes.

En la edad media para conseguir turismo se pagaba a un escultor para realizar la talla de algún gran santo y después se decía que se había encontrado en algún monte de la localidad. También son notorios las muelas y dientes de santos que por su cantidad demuestra que todos los santos eran mutantes con bocas de piraña.

Llevamos ya unos días con propaganda sobre el Santo Cáliz y lo único que nos dicen como prueba de su autenticidad es que los demás competidores no pueden ser.

En pleno siglo XXI esto no cuela. Además las posibilidades de que alguien conservara una copa de un reo y no sus calzoncillos es bien remota.

Estaría bien que los curitas que salen por la tele (no ha salido ningún investigador indepediente) se compraran un Spectrum e intentarán aprender algo de binario además de jugar al comecocos.

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